Gaur San Isidro. Nekazal herrietan gogoratzen da. Zoritxarrez gure elizbarrutian gai hau baztertuta geratu da pastoraltzan, gure egoeraren pobrezia dala-eta, edo beste aukera batzuk argiago dagozalako. Eta zer esanik be ez, euskaldun herri txiketan. Gogoeta bat be egin genduan gai honen inguruan: Herri txikien pastorala: harrobitik periferiara.
Gaur landa herrietako emakumearen egoeraz aberastu egiten dogu gogoeta, David Ceamanos Valero abadearen otoitz honegaz. Eta umorea ez galtzeko, bertso batzuk be badakarguz amaieran.
Buenos
días familia. Hoy 15 de mayo, día de San Isidro labrador, se celebra el
día del mundo rural, en el que nos acordamos especialmente de tod@s los
agricultores/as. Además, pedimos especialmente por el movimiento rural
cristiano de Acción Católica que este año nos invita a reflexionar sobre
este día con el lema: «MUJERES Y RURALES»
Juan 17, 1ss «Ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a tu enviado, Jesucristo».
Señor Jesús,
porque a ti te conoce
quien ama la vida
y cuida con cariño
de esta casa común
que es el mundo...
enséñanos a ser
como San Isidro Labrador,
agricultores/as de tu Evangelio
y sembradoras/es de tu palabra
en medio de la vida,
sintiendonos parte
de un mismo pueblo,
llamado planeta Tierra.
Que como el agricultor
cuida de la tierra,
sepamos nosotr@s
cuidar de esta casa común
que es el mundo.
Que sepamos sembrar
nuestras relaciones
cotidianas,
y la vida
de nuestros pueblos
de semillas
de amor, cariño,
ternura y alegría,
que hagan
del mundo rural,
sinónimo de desarrollo
y vida en abundancia
para tod@s.
Que sepamos cuidar
especialmente la tierra
que sufre las inclemencias
de la miseria,
la pobreza o la injusticia,
y que como la agricultor
quita las malas hierbas
para que crezcan
los buenos frutos,
que sepamos nosotros,
arrancar de la vida
las malas hierbas
del egoísmo
que no nos dejan
caminar unidos.
Que seamos ser
una cooperativa
de hombres y mujeres
que cosechan
constantemente
los frutos de la fraternidad
para hacer posible
que a nadie le falte
lo necesario para vivir
con alegría y esperanza.
Que celebrar la fiesta
de San Isidro Labrador,
no se quede sólo en pensar
en los agricultores
que hacen posible
que podamos comernos
una rica sandía
como las de Alfamén,
o gozar de los ricos
productos de la tierra...
que además
nos invite a pensar
que todos formamos parte
de un solo pueblo,
que todos formamos
una sola humanidad,
que nos pertenecemos
los unos a los otros,
y que entre todos
tenemos la misión
de cuidar de la vida
y de la Madre Tierra.
Y pidamos hoy
especialmente,
por todas las mujeres
del medio rural,
para que sigan siendo
motor de futuro y esperanza
en medio del mundo. Amén.
Un besote grande y hasta mañana en el altar.
Juan 17, 1ss «Ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a tu enviado, Jesucristo».
Señor Jesús,
porque a ti te conoce
quien ama la vida
y cuida con cariño
de esta casa común
que es el mundo...
enséñanos a ser
como San Isidro Labrador,
agricultores/as de tu Evangelio
y sembradoras/es de tu palabra
en medio de la vida,
sintiendonos parte
de un mismo pueblo,
llamado planeta Tierra.
Que como el agricultor
cuida de la tierra,
sepamos nosotr@s
cuidar de esta casa común
que es el mundo.
Que sepamos sembrar
nuestras relaciones
cotidianas,
y la vida
de nuestros pueblos
de semillas
de amor, cariño,
ternura y alegría,
que hagan
del mundo rural,
sinónimo de desarrollo
y vida en abundancia
para tod@s.
Que sepamos cuidar
especialmente la tierra
que sufre las inclemencias
de la miseria,
la pobreza o la injusticia,
y que como la agricultor
quita las malas hierbas
para que crezcan
los buenos frutos,
que sepamos nosotros,
arrancar de la vida
las malas hierbas
del egoísmo
que no nos dejan
caminar unidos.
Que seamos ser
una cooperativa
de hombres y mujeres
que cosechan
constantemente
los frutos de la fraternidad
para hacer posible
que a nadie le falte
lo necesario para vivir
con alegría y esperanza.
Que celebrar la fiesta
de San Isidro Labrador,
no se quede sólo en pensar
en los agricultores
que hacen posible
que podamos comernos
una rica sandía
como las de Alfamén,
o gozar de los ricos
productos de la tierra...
que además
nos invite a pensar
que todos formamos parte
de un solo pueblo,
que todos formamos
una sola humanidad,
que nos pertenecemos
los unos a los otros,
y que entre todos
tenemos la misión
de cuidar de la vida
y de la Madre Tierra.
Y pidamos hoy
especialmente,
por todas las mujeres
del medio rural,
para que sigan siendo
motor de futuro y esperanza
en medio del mundo. Amén.
Un besote grande y hasta mañana en el altar.
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