La rogativa a Urkiola a pie por el coronavirus

No se fletarán autobuses, ni habrá música ni hamaiketako para evitar aglomeraciones, escribe Leire Pérez en El Correo.

El coronavirus sigue marcando la agenda política, social y hasta la religiosa. No hay evento que no esté siendo trastocado por la dichosa pandemia que nos acecha desde el pasado mes de marzo. La rogativa a San Antonio que cada 20 de junio se celebra en el santuario de Urkiola, también sufrirá este año cambios. En esta ocasión, por ejemplo, no se fletarán autobuses desde los distintos municipios de Arratia y los devotos deberán acudir andando o en coche, con las limitaciones de aparcamiento existentes. Aunque lo cierto es que también se reducirá la presencia a 150 personas en el interior del templo por lo que la afluencia de personas nada tendrá que ver con la de otros años. Los que no lleguen a tiempo podrán seguir el acto desde el exterior.

Más limitaciones. Ni música y tampoco se celebrará el habitual hamaiketako en el entorno del santuario, tras la misa. Para otro momento quedará también el concurso fotográfico que anualmente organiza la asociación Zulaibar Lanbide Ikastegia.

La misa, como en otras ocasiones, se celebrará a las 11.00 horas y será este año Mikel Azpeitia, el párroco de Arratia, el encargado de oficiar el acto religioso que llevará por título ´Jesusen Jainkoa bidelagun´. Como no podía ser de otra forma se recordará a aquellos que han perdido la vida a causa del Covid-19. El dinero que las distintas parroquias no gastarán este año al no flotar autobuses también se donará para los afectados por el virus.

Madrugón

Desde Dima e Igorre se citará a los asistentes que quieran subir en grupo a las 7.00 horas, En el primer pueblo se concentrarán en la plaza y en el segundo en el entorno de la ermita de San Antonio. Por su parte, los vecinos de Zeanuri partirán desde la ermita de San Antonio Txikerra media hora más tarde. La organización recuerda que en completar el paseo se tarda alrededor de "tres horas y cuarto". Lo cierto es que son muchas las personas que este día aprovechan para practicar ejercicio y subir al monte por lo que la imposibilidad de ir en autobuses no restará asistencia.

Además, a los asistentes que acudan a pie se les enseñará un itinerario que fue señalizado hace unos años por parte de la asociación Joko Alai y el Ayuntamiento de Zeanuri.

El próximo sábado, día de San Antonio, Igorre celebrará una misa a partir de las 12.30 horas en la iglesia. No podrá tener lugar en la ermita, lógicamente para poder cumplir las medidas de seguridad y distanciamiento. Con el cambio de ubicación se podrá albergar a 120 personas. "Se tomará la temperatura al entrar, se distanciarán y se desinfectarán los bancos", explican.